El Arco de Tito

El Arco de Tito, que nunca se menciona en los textos antiguos, pero que puede atribuirse a éste gracias a la dedicatoria de la parte este del ático, se encuntra todavía hoy en el punto más alto de la calle que viene del Foro Romano. Con unas dimensiones de 14, 50 m de altura, 13, 50 m de anchura y 4,75 m de profundidad, este arco abovedado, con una estructura sencilla y sólida de mármol pentélico, está dividido por cuatro medias columnas en cada uno de sus lados. Los edificios de Roma y el genio del pueblo romano decoraban las piedras finales de la bóveda, diosas de la victoria volando sobre globos aparecen añadidas a las arquivoltas, mientras que en el centro de la cúpula, cubierta por una bella bóveda artesonada, uno de los canales representa la apoteosis de Tito que aparece montado en un águila que lo lleva hacia el cielo.
El arquitrabe estaba situado en un pequeño relieve que sólo se ha conservado en el centro del lado este y que representa la victoria de Vespasiano y de Tito sobre los judíos (71 d.C) en momentoa de la cual se construyeron el Arco del Senado y el del Pueblo Romano. Mientras que las toscas figuras del pequeño friso, esculpidas en la técnica de altorrelieve, siguen la línea marcado por el pequeño friso de Ara Pacis, en los grandes relieves, situados en fos grandes tablas de la bóveda que representan dos episodios del triunfo en Judea, se impone una nueva concepción artística.

Arco de Tito

En panel del lado sur muestra el inicio de la ceremonia, es decir, la procesión cruzando la puerta de la victoria, que está representada en el lado derecho más exterior con una perspectiva escorzada, mientras que los sirvientes traen el botín desde el templo de Jerusalén (las trompetas de plata, los candelabros de siete brazos) y los paneles provistos de asas en lso que probablemente se perfilaron las inscripciones que explicaban lo que eran los objetos y los nombres de las ciudades.

Arco de Tito Menorah
Por otra parte, el panel de lado norte representa el episodio central de la celebración del triunfo, es decir, el emperador Tito que, acompañado de una diosa de la Victoria que le corona, avanza sobre una cuádriga precedida por lictores y dirigida por la diosa Roma, seguido de las figuras alegóricas del pueblo y del senado romano, representados, respectivamente, por un hombre joven con el torso desnudo y hombre viejo vestido con toga.
La acentuación diferenciada de las figuras representadas y de los objetos que de diversas maneras van amontonándose de forma soslayada sobre las cabezas, logra un efecto sobre la distribución del espacio. La eficiente ordenación de las figuras en la parte superior de la línea que deja de ser horizontal para ser convexa, hace que el movimiento de la procesión del panel del lado sur resulte casi real.