El concreto hecho en obra se obtiene de la unión entre materiales que provienen de las rocas, ya sean naturales o procesados, con cemento y agua, aunque también se le puede agregar otras sustancias.
Pasos para tener un buen concreto hecho en obra:
Se toma una superficie adecuada y se cubre con una manta de concreto, nivelado y perfectamente aplanado, en donde posteriormente se mezclara todo tipo de concreto. Primero se vacía sobre la superficie la arena, y se agrega el cemento dando la posibilidad de comenzar a realizar la mezcla con los materiales adecuados. Se deben mezclar hasta obtener un color uniforme, que por lo general se da luego de unas 2 o 3 vueltas.
Una vez tenemos la arena y el cemento hechos una sola mezcla, debemos extender la misma y colocamos el agregado grueso y se procede a colocar de manera que quede una capa consistente y bien mezclada, y por el medio preferiblemente se le abrirá un hoyo donde posteriormente añadiremos una cantidad adecuada de agua. Para terminar el concreto hecho en obra, derrumbamos las paredes que quedaron una vez abrimos el hoyo, y las mezclamos de un lado a otro constantemente hasta que veamos que el resultado presenta un color uniforme.
Ten en cuenta que luego de cierto tiempo (20 a 30 minutos) la mezcla comenzara a endurecer, por lo que debes hacer uso de la misma lo mas rápido posible. Una vez se endurezca no deberás darle uso. Como veras obtener concreto hecho en obra es una tarea muy sencilla de realizar, que nos puede ayudar a terminar grandes obras.